Puertos con sus espigones rotos, el más espectacular quizá
el de la prolongación del espigón del puerto de Malpica. Toneladas de hormigón
y piedra desplazados.
Faros destrozados, como la marca cardinal de la entrada al
puerto de Burela. Lo que era y cómo quedó…!
Paseos marítimos dañados, a lo largo de toda la costa
gallega y cantábrica, y una vez más en A
Coruña.
Viviendas demolidas por el mar y locales arrasados, arenales
desaparecidos, barcos encallados, etc…
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Muchos han sido este invierno los temporales que nos han ido
machacando, pero “Cristina” ha sido ya la puntilla. Las olas han querido
salirse del mar y reconquistar el terreno perdido.
Por supuesto “Cristina” no se hace responsable de las
perdidas ni tiene conocimiento ni le consta… Cómo va a ser si es una tormenta,
real pero temporal al fin y al cabo, aunque noos haya comido la moral y un buen
bocado al erario público.
Lo bueno es que por fin “Cristina" se ha ido con viento
fresco. Llegó la calma y por primera vez desde el pasado diciembre salió el sol…
¡Ganas teníamos! Ojalá sea una metáfora de algo más.
Ufff!,,
ResponderEliminarHay a pesar de los destrozos un punto de belleza en esas olas ( siempre y cuando no te pille en el mar, que debe estar bonito ahí adentro)
Que pena los delfines y la ballena. Sin embargo creo que todo esto tiene un porque y una razón
Disfrutar del buen tiempo
Feliz finde!
j
Pienso como tu, todo tiene su razón de ser.
EliminarLa naturaleza furiosa tiene una belleza espectacular, aunque prolongada en el tiempo cansa y no deja de ser peligrosa. Lo peor, como dices, las personas, delfines, ballenas, leones de mar, focas y aves afectadas.
Hoy y mañana a salir al mar y acumular vitamina D antes de que llegue el próximo.
Buen finde para ti también.
Menos mal que ya pasó y no se hizo permanente. "Cristina" hizo daño, pero los hay peores. Un abrazo. Llámame de ayudante cuando quieras.
ResponderEliminarLos hay peores y las hay peores... Je,je. Pero la mar pocas veces la he visto tan cabreada.
EliminarPoco o nada de movimiento hay. Hace ya más de un año que no navegamos juntos, y no por falta de ganas.
Un fuerte abrazo Mera y recuerdos a tu santa.